Security Locks Are Good
After this punishment, are we all certain that speech is for the good?
Just listen up while this thin, thin silence brings down our spirits with a smiling grin.
Are we all certain that the mood is set low enough now?
Do not speak--hush, when it seems not all song and dance.
Right now, not that many things make a difference.
Cats, dogs, children and their toys, nothing.
Are we really lucky to just stand by here and watch?
Would we actually make noise if we were warm?
I can hardly believe so.
All the bollocks flow down on us like wet snow.
I have said it before and I will say it again.
We could stand up and shout.
But only when their backs are turned at us.
We could speak our minds.
But only when the tape is not rolling.
Idiot question, but are we all certain that our lives are safe enough in the arms of these saviors?
Yeah.
We have seen the cat gold at the end of this rainbow.
No walls are thick enough, except theirs, of course.
Open a door, walk the streets and cherish the dynamics of the Exclusion City.
Los candados de seguridad son buenos
Después de este castigo, ¿estamos todos seguros de que el habla es para el bien?
Solo escucha mientras este delgado, delgado silencio baja nuestros ánimos con una sonrisa.
¿Estamos todos seguros de que el ánimo está lo suficientemente bajo ahora?
No hables, cállate, cuando parece que no todo es cantar y bailar.
En este momento, no muchas cosas hacen la diferencia.
Gatos, perros, niños y sus juguetes, nada.
¿Realmente tenemos suerte de simplemente quedarnos aquí y mirar?
¿Haríamos ruido si estuviéramos cálidos?
Apenas puedo creerlo.
Toda la mierda cae sobre nosotros como nieve mojada.
Lo he dicho antes y lo diré de nuevo.
Podríamos levantarnos y gritar.
Pero solo cuando nos dan la espalda.
Podríamos decir lo que pensamos.
Pero solo cuando la cinta no está grabando.
Pregunta de idiota, ¿estamos todos seguros de que nuestras vidas están lo suficientemente seguras en los brazos de estos salvadores?
Sí.
Hemos visto el oro del gato al final de este arcoíris.
No hay paredes lo suficientemente gruesas, excepto las suyas, por supuesto.
Abre una puerta, camina por las calles y aprecia la dinámica de la Ciudad de la Exclusión.
Escrita por: Tuomas Tuominen