Meu Socorro
Mesmo que as noites pareçam longas,
e eu não veja à minha frente horizontes;
Se todos se esquecerem de mim,
e, abandonado, eu me sentir...
ergo os meus olhos pros montes!
Ainda que a figueira não floresça,
que as minhas estruturas se abalem;
espero nas promessas d’Aquele
que jamais falhou e nem mentiu!
Ergo os meus olhos pros montes...
de onde virá o meu socorro?
O meu socorro vem de Deus, o Deus que fez o Céu e a Terra;
e os Seus planos para mim são de alegria e de esperança.
Me guardará, por onde eu andar.
Me cercará de proteção, me cuidará!
Mi Ayuda
Aunque las noches parezcan largas,
y no vea horizontes delante de mí;
Si todos me olvidan,
y me siento abandonado...
¡levanto mis ojos hacia las montañas!
Aunque la higuera no florezca,
y mis estructuras se tambaleen;
espero en las promesas de Aquel
que nunca falló ni mintió.
¡Levanto mis ojos hacia las montañas...
¿De dónde vendrá mi ayuda?
Mi ayuda viene de Dios, el Dios que hizo el Cielo y la Tierra;
y Sus planes para mí son de alegría y esperanza.
Me guardará, dondequiera que vaya.
Me rodeará de protección, ¡me cuidará!