O Espanhol e o Carioca
Em uma linda cidade importante
Num lugar distante no interior do estado
Lá se deu um fato surpreendente
Que todos os presentes ficaram abismados
No hotel de um espanhol
Que se orgulhava naquele sobrado
Recebia uma nova lei pra servir o freguês
Avisou os empregados
Somente aqui será atendido
Quem vier bem vestido e engravatado
E naquele hotel de luxo
Chegou um certo dia um senhor educado
Vários dias que vinha viajando
Seu terno grã-fino já meio empoeirado
Exigiu uma refeição
E pra ser atendido um quarto separado
Proprietário que mal reparou
Não simpatizou e falou entusiasmado
O vosso traje não está suficiente
Pra ser atendido em nossos cuidados
O viajante sendo um bilionário
Ficou bem bonito para os assistentes
Compro já seu hotel sem ser necessário
Respondeu duvidando o espanhol sorridente
Pra comprar esse meu movimento
Nove bilhões você me apresente
Só da venda de uma propriedade
O viajante trazia dinheiro suficiente
De uma pasta ele tirou
Mais de vinte bilhões mostrou pra aquela gente
Faço isso que sirva de exemplo
Que não se desfaça de um homem viajado
Que conhece o Brasil inteiro
E bem conhecido em todos os estados
O espanhol vendeu o hotel
Dando o assunto por encerrado
Perguntando para o viajante
Aonde morava, como era chamado
Em Angatuba eu sou Renatinho
Da Rocha Miranda, carioca estimado
El Español y el Carioca
En una hermosa ciudad importante
En un lugar lejano en el interior del estado
Ocurrió un hecho sorprendente
Que dejó a todos los presentes asombrados
En el hotel de un español
Que se enorgullecía de su mansión
Recibió una nueva ley para atender al cliente
Les avisó a los empleados
Solo será atendido aquí
Quien venga bien vestido y con corbata
Y en ese lujoso hotel
Llegó un día un caballero educado
Después de varios días viajando
Su traje de alta calidad ya algo polvoriento
Exigió una comida
Y para ser atendido, una habitación separada
El dueño, que apenas lo notó
No le agradó y habló entusiasmado
Tu vestimenta no es suficiente
Para ser atendido en nuestras instalaciones
El viajero, siendo un multimillonario
Se presentó muy elegante ante los asistentes
Compro tu hotel sin necesidad
Respondió sonriente el español, incrédulo
Para comprar mi propiedad
Necesitas presentarme nueve mil millones
Solo con la venta de una propiedad
El viajero tenía suficiente dinero
De su maletín sacó
Mostró más de veinte mil millones a esas personas
Hago esto como ejemplo
Para que no subestimen a un hombre viajado
Que conoce todo Brasil
Y es conocido en todos los estados
El español vendió el hotel
Dando por cerrado el asunto
Preguntó al viajero
Dónde vivía, cómo se llamaba
En Angatuba soy Renatinho
De Rocha Miranda, carioca estimado
Escrita por: Cidão / Manoelito Nunes