All Praise Be To God
All praise be to God, whom all things obey,
From angels and men for ever and aye:
Who sendeth on earth the powers of His throne,
His providence good and love to make known.
His angels are they of countenance fair,
The arm of His strength, His hand of kind care:
His message of peace to us they reveal,
His wisdom most high they seal or unseal.
By martyrs of old they stood in the flame,
And bade them not flinch, but call on God’s Name.
Thro’ torment, thro’ shame, thro’ darkness of death
They led without fear the sires of our faith.
They stand with the few, they fight for the free,
God’s reign to advance o’er land and o’er sea:
And when the brave die or fall in the fight,
Their spirits they bear to rest in God’s sight.
For patience and toil a crown they prepare;
They found for the meek a kingdom full fair;
No famine nor plague ’gainst them doth prevail;
Their bread cannot lack, their cruse cannot fail.
We pray Thee, who art Thy angels’ reward,
Thy flock to defend forget not, O Lord;
But prosper their aid, that us they may bring
To see the true face of Jesus, our King.
Toda alabanza sea a Dios
Toda alabanza sea a Dios, a quien todas las cosas obedecen,
Desde ángeles y hombres por siempre jamás:
Quien envía a la tierra los poderes de Su trono,
Su providencia buena y amor para dar a conocer.
Sus ángeles son de semblante hermoso,
El brazo de Su fuerza, Su mano de cuidado amable:
Su mensaje de paz nos revelan,
Su sabiduría altísima sellan o desvelan.
Por mártires de antaño se mantuvieron en la llama,
Y les ordenaron no retroceder, sino invocar el Nombre de Dios.
A través de tormento, a través de vergüenza, a través de oscuridad de la muerte
Guiaron sin temor a los padres de nuestra fe.
Están con los pocos, luchan por los libres,
Para avanzar el reinado de Dios sobre tierra y mar:
Y cuando los valientes mueren o caen en la batalla,
Sus espíritus llevan al descanso ante la vista de Dios.
Por paciencia y trabajo preparan una corona;
Encontraron para los mansos un reino muy justo;
Ni hambruna ni plaga prevalecen contra ellos;
Su pan no puede faltar, su vasija no puede fallar.
Te rogamos, que eres la recompensa de Tus ángeles,
No olvides defender a Tu rebaño, oh Señor;
Pero prospera su ayuda, para que nos puedan llevar
A ver el verdadero rostro de Jesús, nuestro Rey.