Frequência (part. Clovis Pinho)
É louco demais ver como a vida passa
Vê os tesouros do mundo sendo engolidos
Por ferrugem e traça, no rol dos heróis, na liga da injustiça
Onde arrogantes degustam sua própria carniça
A cortesia da soberba é a queda, o segredo
É ser intenso e celebrar quem te celebra
A vida é curta e tem poucas cenas e as estrelas
E os coadjuvantes mudam com frequência
Eu não vivo em busca do melhor roteiro
Sou governado pela paz do homem morto no madeiro
E sem me embriagar com som dos aplausos
Pois tenho sede de justiça e não obsessão por palcos
A plataforma não define um homem
Mas no que ele acredita em qual verdade o consome
Deus do céu me revista de franca poesia
E que tudo que oblíquo se revele no som da batida
O senhor conhece as minhas origens
E eu sei que Jesus também nasceu lá
Na periferia
Ainda que a morte me assole com a frustração que invade
Não enterrarei meus talentos no campo dos covardes
Porque o medo me impede de lutar
Mas eu acordo a minha alma todo dia pra sonhar
Nada se cria, nada se perde tudo se transforma
No mundo em que vivemos, tudo se vende
Tudo se compra tudo se troca
A vida real contada em um conto de fadas
Onde os sonhos são cativos das gavetas
Empoeiradas dos réus fadados ao ativismo e que compram
Apostasia em forma de anti depressivos
Capitalismo é isso torna as pessoas lixo
Se um cego guiar outro cego ambos
Cairão no abismo
A face oculta não aparece no noticiário
Nem Jesus clamando por água e
Roma dando vinagre
O maestro que rege um coral de mudos
Tem a loucura como a principal virtude
E sem sair da sintonia e da frequência dos sonhos
E dar a volta no mundo andando de carona
Mas a essência se explica ao olhar pro espelho
Porque meu bom, os fins não justificam os meios
A vida é muito mais que isso
Frecuencia (parte Clovis Pine)
Es demasiado loco para ver cómo va la vida
Ver los tesoros del mundo siendo tragados
Para el óxido y la polilla, en el papel de héroes, en la liga de la injusticia
Donde arrogante sabor su propia carroña
La cortesía del orgullo es la caída, el secreto
Es para ser intenso y celebrar quién te celebra
La vida es corta y tiene pocas escenas y las estrellas
Y los agentes de apoyo cambian a menudo
No vivo en busca del mejor guión
Estoy gobernada por la paz del hombre muerto en el bosque
Y sin emborracharse con el sonido de los aplausos
Porque tengo sed de justicia y no obsesión con el escenario
La plataforma no define a un hombre
Pero lo que él cree en lo que la verdad lo consume
Dios en el cielo me revista con poesía franca
Y deja que todo lo oblicuo se revele en el sonido del ritmo
Conoces mis orígenes
Y sé que Jesús también nació allí
En la periferia
Aunque la muerte me asfila con la frustración que invade
No enterraré mis talentos en el campo de los cobardes
Porque el miedo me impide pelear
Pero despierto mi alma todos los días para soñar
Nada se crea, nada se pierde Todo se transforma
En el mundo en el que vivimos, todo se vende
Todo lo que compras todo lo que cambias
La vida real contada en un cuento de hadas
Donde los sueños están cautivos de cajones
Demandados polvorientos condenados al activismo y que compran
Apostasía en forma de antidepresivos
El capitalismo es que hace basura a la gente
Si un ciego lleva a otro ciego ambos
Ellos caerán en el abismo
La cara oculta no aparece en las noticias
Ni Jesús llorando por agua y
Roma dando vinagre
El conductor que dirige un coro silencioso
Tiene la locura como virtud principal
Y sin dejar la melodía y la frecuencia de los sueños
Y dar la vuelta al mundo haciendo autostop
Pero la esencia se explica mirando en el espejo
Porque mi bien, los fines no justifican los medios
La vida es mucho más que eso
Escrita por: Felipe Vilela