Cemitério de Campanha

Cemitério de campanha,
Rebanho negro de cruzes
Onde à noite estranhas luzes
Fogoneiam tristemente
Até o próprio gado sente
No teu mistério profundo
Que és um pedaço de mundo
Noutro mundo diferente

Pouso certo dos humanos
Fim de calvário terreno,
Onde o grande e o pequeno
Se irmanam num mundo só.
E onde os suspiros de dó
De nada significam
Porque em ti os viventes ficam
Diluídos no mesmo pó.

Até o ar que tu respiras
Morno, tristonho e pesado,
Tem um cheiro de passado
Que foi e não volta mais.
A tua voz, são os ais
Do vento choramingando
Eternamente rezando
Gauchescos funerais.

Coroas, tocos de velas
De pavios enegrecidos
Que em Terços mal concorridos
Foram-se queimando a meio
Cruzes de aspecto feio
De alguém que viveu penando
E depois de andar rolando
Retorna ao chão de onde veio.

Mas que importa a diferença
Entre uma cruz falquejada
E a tumba marmorizada
De quem viveu na opulência?
Que importa a cruz da indigência
A quem já não vive mais,
Se somos todos iguais
Depois da existência?

Que importa a coroa fina
E a vela de esparmacete?
Se entre os varais do teu brete
Nada mais tem importância?
Um patrão, um peão de estância
Um doutor, uma donzela?
Tudo, tudo se nivela
Pela insignificância.

Por isso quando me apeio
Num cemitério campeiro
Eu sempre rezo primeiro
Junto a cruz sem inscrição,
Pois na cruz feita a facão
Que terra a dentro se some
Vejo os gaúchos sem nome
Que domaram este Chão.

E compreendo, cemitério,
Que és a última parada
Na indevassável estrada
Que ao além mundo conduz
E aqueces na mesma luz
Aqueles que não tiveram
E aqueles que não quiseram
No seu jazigo uma Cruz.

E visito, de um por um,
No silêncio, triste e calmo,
Desde a cruz de meio palmo
Ao mais rico mausoléu,
Depois, botando o chapéu
Me afasto, pensando a esmo:
Será que alguém fará o mesmo
Quando eu for tropear no Céu???

Cementerio de Campaña

Cementerio de campaña
Manada negra de cruces
Donde por la noche luces extrañas
Disparan tristemente
Incluso el ganado se siente
En tu profundo misterio
Que eres un pedazo del mundo
En otro mundo diferente

Aterrizaje derecho de los humanos
Fin de la prueba terrenal
Donde lo grande y lo pequeño
Se unen en un solo mundo
Y donde los suspiros de piedad
No significan nada
Porque en ti los vivos permanecen
Diluido en el mismo polvo

Incluso el aire que respira
Cálido, triste y pesado
Huele a pasado
Que fue y no volverá
Tu voz, es la desgracia
del viento lloriqueando
Orando eternamente
Gauchescos funerarios

Coronas, tocones de velas
De mechas ennegrecidas
Que en tercios mal compitieron
Fueron quemados en el medio
Cruces de aspecto feo
De alguien que vivió en penitencia
Y después de rodar
Vuelve al suelo de donde viniste

Pero, ¿qué importa la diferencia?
Entre una cruz falquejada
Y la tumba de mármol
¿De quién has vivido en opulencia?
¿A quién le importa la cruz de la pobreza?
Para aquellos que ya no viven
Si todos somos iguales
¿Después de la existencia?

¿Qué importa la corona fina?
¿Qué hay de la vela chispeante?
Si entre los pentagramas de su brete
¿Nada más importa?
Un jefe, un peón de un resort
¿Un médico, una doncella?
Todo, todo está nivelado
Por insignificancia

Es por eso que cuando me pongo en ello
En un cementerio campeón
Yo siempre rezo primero
Junto a la cruz sin inscripción
Porque en la cruz hecha de machete
La tierra dentro se ha ido
Veo a los gauchos sin nombre
Quién domó este piso

Y lo entiendo, cementerio
Que eres la última parada
En el camino insondable
Que al más allá del mundo lleva
Y te calientan en la misma luz
Los que no han tenido
Y aquellos que no querían
En su tumba una cruz

Y visito, uno por uno
En el silencio, triste y tranquilo
Desde la cruz de medio pie
Para el mausoleo
Y luego ponerse el sombrero
Me voy, pensando para mí mismo
¿Alguien hará lo mismo?
Cuando voy a tropezar en el cielo???

Composição: Jayme Caetano Braun