395px

El mito de Juan de la Sierra

Thiago David

Mito do João da Serra

Se um cabra safado vem me abestalhar,
Eu digo com um murro pra ele se assuntar.
Se ele voltar de alma pra vir me penar.
Mando ele ligeiro praquele lugar.
Dei dois tapas, um murro no meios dos córneos,
Enfiei-lhe a cabeça no mictório enquanto gritava
Por Pedro Notório
Que veio correndo pra me afrontar.
Sai correndo pro meio do povo
Tentado evitar aquele alvoroço
De gente apexada e desengraçada puta da vida
Querendo me matar.

Me escondi no mato pra ninguém me achar.
Me perdi, pois de besta corri sem olhar.
Com medo gritei pra alguém me encontrar
E Pedro Notório veio lhe salvar.
Que merda que medo, que mundo pequeno!
Num aperto de Mãos, me arrancou o dedo.
E de meigo ou de ruim me chamou de jeito
Pra casa dele pra gente jantar
Um prato de carne ao queijo qualho
Feito ao leito com bastante alho
No ponto e bonzinho,
Temperadinho, tão gostosinho que é de matar.

Como pude ser besta e o convite aceitar?
Se a pouco esse Pedro ia me quebrar?
Me borrei de medo ao me lembrar
Que o gosto de Pedro era peculiar.

Me empurrou no peito, cai de jeito
Bati com a cabeça num grande azulejo
Só pra ser cortado em cubos quadrados
E ser feito ensopado pelo animal
Bem temperado ao leite e alho
Morri porque fui um pouco otário
E acabo agora bem degustado
Aos mil pedaços pelo canibal.

El mito de Juan de la Sierra

Si un tipo desvergonzado viene a molestarme,
Le digo con un puñetazo que se asuste.
Si vuelve con ánimo de atormentarme,
Lo mando rápido a ese lugar.
Le di dos bofetadas, un puñetazo en medio de los cuernos,
Le metí la cabeza en el mingitorio mientras gritaba
Por Pedro Notorio
Que vino corriendo a desafiarme.
Salí corriendo entre la gente
Tratando de evitar ese alboroto
De gente enojada y desgraciada, puta de la vida
Queriendo matarme.

Me escondí en el monte para que nadie me encontrara.
Me perdí, pues tontamente corrí sin mirar.
Con miedo grité para que alguien me encontrara
Y Pedro Notorio vino a salvarme.
Qué mierda, qué miedo, qué mundo pequeño!
En un apretón de manos, me arrancó el dedo.
Y de buena o mala manera me llamó
A su casa para cenar
Un plato de carne con queso coalho
Hecho en la cama con mucho ajo
En su punto y sabroso,
Sazonadito, tan rico que mata.

¿Cómo pude ser tan tonto y aceptar la invitación?
¿Si hace poco este Pedro iba a romperme?
Me asusté al recordar
Que el gusto de Pedro era peculiar.

Me empujó en el pecho, caí de lado
Golpeé mi cabeza contra un gran azulejo
Solo para ser cortado en cubos cuadrados
Y ser hecho estofado por el animal
Bien sazonado con leche y ajo
Morí porque fui un poco tonto
Y ahora termino bien degustado
En mil pedazos por el caníbal.

Escrita por: Thiago David