Rainbow

Arcoíris

Había una vez, tú vagabundeaste por mi camino, y elevaste mis noches con un desfile de soñadores. El rompecabezas encajaba perfectamente, con un efecto de cuento de hadas, pero necesitaba algo para completarlo. Así que le dije a mi compañero de cuarto, si veía un arcoíris, te adoraría. Entonces abrí las cortinas rezando por la lluvia, y supliqué cada larga noche, por un cielo de cascada, porque entonces sabría con certeza que mi corazón no mentía. Estaba empezando a amarte, convencida de que era pegamento, pero no quería maldecir mi pista de afirmación. Así que le dije a mi compañero de cuarto, si veía un arcoíris, te adoraría. Y abrí las cortinas rezando por la lluvia. Cuarenta días y noches, nada más que cielos despejados. La mayoría no se quejaría, pero yo necesitaba una pelea. Estaba cruzando mis críticas, para un desglose de trueno, con la esperanza del maquillaje y un cielo colorido. Así que le dije a mi compañero de cuarto, si veía un arcoíris, te adoraría. Luego cerraste las cortinas antes de que lloviera, luego la radio se descompuso, me envió una canción triste, sin estrellas fugaces para equilibrarla. Y así fue el final, de mi último novio. Aprendí dónde falló el amor, fue cuando escribí esta canción, porque el goteo no está en mis manos.