La araña

Triste día teñido de sangre
graves las campanas que tocar a muerto.
Rozando la esquina como una lagartija
clava las uñas donde quiere llegar.
Por tu cara baja sin disfraz,
por tu cara baja.

Detrás de una puerta que no guarda nada
locos y ociosos, esto no sale bien.
En la palma de la mano sin ningún control
excitada hasta el sadismo, saciada quedó.
¡por tu cara! baja sin disfraz
la araña...¡quiere más!

Largos dedos consumidos ya
casi mueca de su gesto ¿qué puede faltar?
Se oye algún ladrido cada vez más lejos
no dejes en la ventana a tu prisionero.
¡Por tu cara! baja sin disfraz
la araña...¡quiere más!

La sombra por la pared le sigue el compás
un héroe en la mano y su hora fatal.
Dan ganas de todo ¡que nos quemen a los dos!
pero antes terminemos reventandola.
Por tu cara baja sin disfraz
la araña...¡quiere más!
¡Por tu cara!...
La araña...¡baja!