A Mi Cerrada

Nostalgia y Transformación en 'A Mi Cerrada' de Fernando Delgadillo

La canción 'A Mi Cerrada' de Fernando Delgadillo es una profunda reflexión sobre el paso del tiempo y la transformación de los espacios que una vez fueron significativos en la vida del narrador. Desde el inicio, Delgadillo nos transporta a su infancia, cuando la cerrada era un campo abierto y un lugar de juegos y aventuras. La bicicleta y la lluvia son símbolos de libertad y exploración, representando un tiempo de inocencia y descubrimiento.

A medida que la canción avanza, se observa la transformación de la cerrada en una zona residencial. Este cambio trae consigo una sensación de pérdida y nostalgia. La cerrada, que antes era un espacio de comunidad y familiaridad, se convierte en un lugar lleno de desconocidos y de indiferencia. La llegada de nuevos autos y el asfalto simbolizan la modernización y el alejamiento de las raíces. La nostalgia se intensifica cuando el narrador recuerda su juventud, sus primeros amores y la sensación de pertenencia que sentía al regresar a casa.

En la última parte de la canción, Delgadillo describe la ciudad como un lugar oscuro y solitario, lleno de extraños y de ruido constante. La cerrada, que antes era un refugio, ahora es un callejón sin salida, una metáfora de la imposibilidad de regresar al pasado y de la sensación de estar atrapado en una vida que ha perdido su sentido de comunidad y simplicidad. La canción es un lamento por la pérdida de un tiempo y un lugar que ya no existen, y una crítica a la deshumanización y el aislamiento que trae consigo la urbanización y el progreso.