And The Band Played Waltzing Matilda

Y La Banda Tocaba Waltzing Matilda

Cuando era joven cargaba mi mochila,
Y vivía la vida libre de un vagabundo,
Desde la verde cuenca del Murray hasta el árido outback,
Bailaba mi Matilda por todas partes.
Luego en 1915 mi país dijo 'Hijo,
es hora de dejar de vagar, hay trabajo por hacer',
Así que me dieron un casco y me dieron un arma,
Y me enviaron a la guerra.
Y la banda tocaba Waltzing Matilda,
Mientras el barco se alejaba del muelle,
Y entre lágrimas, agitando banderas y aplausos,
Zarpamos hacia Gallipoli.

Recuerdo ese terrible día,
Cuando nuestra sangre manchaba la arena y el agua,
Y cómo en ese infierno que llamaban Bahía Suvla,
nos masacraron como corderos en el matadero.

Johnny Turk estaba listo, oh se había preparado bien,
Nos llovió balas y nos bombardeó con proyectiles,
Y en cinco minutos planos estábamos todos hechos pedazos,
Casi nos mandan de vuelta a Australia.

Y la banda tocaba Waltzing Matilda,
Cuando nos detuvimos a enterrar a nuestros caídos,
Y enterramos a los nuestros y los turcos enterraron a los suyos,
Y todo comenzó de nuevo.

Quienes seguían con vida solo intentaban sobrevivir,
En ese mundo loco de sangre, muerte y fuego,
Y durante diez largas semanas me mantuve con vida,
Aunque a mi alrededor los cadáveres se acumulaban más y más alto.

Entonces una gran bomba turca me volteó de cabeza,
Y cuando desperté en mi cama de hospital,
Y vi lo que había hecho y deseé estar muerto,
Nunca supe que había cosas peores que morir.

Porque ya no iré más bailando Matilda,
Por todo el arbusto verde lejos y cerca,
Porque para cargar la carpa y las estacas un hombre necesita ambas piernas,
No más bailando Matilda para mí.

Recogieron a los heridos, los lisiados y mutilados,
Y nos enviaron de vuelta a casa a Australia,
Los sin brazos, los sin piernas, los ciegos, los locos,
Esos orgullosos héroes heridos de Suvla.

Y cuando el barco llegó a Circular Quay,
Miré el lugar donde solían estar mis piernas,
Y agradecí a Cristo que no hubiera nadie esperándome allí,
Para lamentar y compadecerse.

Y la banda tocaba Waltzing Matilda,
Mientras nos llevaban por la pasarela,
Pero nadie aplaudió, solo se quedaron allí mirando,
Y apartaron sus rostros.

Así que ahora cada abril me siento en mi porche,
Y veo desfilar la procesión ante mí,
Veo a mis viejos camaradas marchar con orgullo,
Renovando sus sueños de gloria pasada.

Veo a los viejos cansados, rígidos y adoloridos,
Los viejos héroes cansados de una guerra olvidada,
Y los jóvenes preguntan: '¿Por qué marchan?’,
Y yo me hago la misma pregunta.

Y la banda toca Waltzing Matilda,
Y los viejos aún responden al llamado,
Pero año tras año los números disminuyen,
Algún día nadie marchará allí en absoluto.

Waltzing Matilda, Waltzing Matilda,
¿Quién vendrá a bailar Matilda conmigo?,
Y sus fantasmas pueden ser escuchados mientras marchan junto al billabong,
¿Quién vendrá a bailar Matilda conmigo?