Mamma Mia

Mi Tito haciendo de las suyas pa' salir del paso
Y yo más consciente que nunca del momento que atravieso

Pues eso

Lo malo de lo bueno es que te mueres, socio
Y lo bueno de lo malo es que siempre hay negocios
Vuelco el líquido en el vaso, se hace tarde por el ocio
Vuelvo malo, hablando raro, oliendo a ron y siempre sucio

No abandono lo que tengo, no le pongas cifra
Se siente si llega Cris porque es el de la mente esquiza
Y suelta versos densos de esos que erizan
Solo van para el aplauso, no están cuando se organiza

Suma y sigue, o resta y sigue
¿Crees que lo estás haciendo bien?
Yo qué sé, no nací pa' ser líder

No sé cuál es mi deber
No sé si quiera si lo tengo
30203, no me olvido de dónde vengo

Adictivo, drácula, vivo por la noche
En el estudio que es la jaula donde todo va de fábula
Mis bártulos, de aquí pa' allá, el trastero reventando
Mi coche en un descampao' y los malos recuerdos colgando

Hola, Cristian, ¿qué dices?
Es que estoy un poquillo mal, es que estoy muy fatal
Estoy fatal de lo mío, ¿vale?
Estoy fatal, llevo unos, llevo unos, pf
Llevo unos, llevo un mes, llevo dos meses, tío
Que estoy, y si no me entero es por eso, ¿vale?
Pero que te quiero un montón
Estoy aquí, estoy aquí, perfecto

Un besico, te quiero, adiós

Qué difícil que se me hace y qué fácil te crees que lo hago
Saben bien por dónde nado
Pero no por dónde me ahogo
Suena bien, ¿cuánto le pago?
Me han dicho que es buen pavo
Soltamos las cinco cifras y no les parece un robo
Estaba claro

Ah, estaba claro
No hacemos temas del palo de ese rollo desgastado
Esto es la K, cabrón, lo saben hasta los que no hablan luego
Pero es fácil de entender, me esconden porque tienen miedo
Mamma mía

No se van los fantasmas de mi cuerpo
Al menos me están molestando menos que otros tiempos
Cuánto trabajito me cuesta decir lo siento

Pero cuánto lo siento

Estoy cerrando ciclos, estoy soltando lastres
He vuelto a agarrar el micro y han vuelto a notar desastres
Kaze va sin flitro, de nada a tus padres
Educando a sus hijos desde tiempos inmemorables

Ah