La calma

La calma, en mi sangre indica inventos, distintos los imprento, la tinta sigue el instinto de mi señal, la robo del aire con sólo respirar, me apropio de esto y de lo otro, aunque hayan cosas que parezcan ser poco, depende el uso que uno les dé, vuelvo al índice, tengo tema, el ABC para emprender escritos, la verdad a veces invoca en gritos sumisos a la mentira, en vida la he visto, es tan destructiva como el SIDA le doy litros de pisco, salen a flote chivas, mentiras, etcétera, la materia del mal y más, espérala, haz la apuesta y perderás, yo tengo las, la máscara de gas y mis letras, intenso, llego al encuentro, a la conexión en este momento con el que sigue, siento como viene con su tempestad, para mostrarte lo que debemos sacar acá.
Sentado, en un acto pasivo, de movimiento vivo, pero no te confíes nunca porque hay jóvenes oscuros que no requieren de mi para estar activos ni llegar aquí en cualquier, cualquier, en cualquier ocasión para tu mente y tu poder quitarte como a un gueón y ya no saltas sobre mi, ya no saltas sobre nadie porque tu cuerpo dentro de ti no tiene carne.
Muy, pero muy, pero muy rápido es como yo actúo, sentado aquí en mi silla sin movimiento alguno, no hablo del poder terrenal hablo del ser humano aquel que puede volar.
666, es una broma al lado del poder que emana cuando estoy en coma y cae la mente sobre cualquier animal que con un arma y a su carne cree que puede despabilar a cualquier gueón que camina tranquilo por cualquier callejón, ese súper teta nuestro campeón.
Así que no pienses en mi no pienses en matarme porque si tu lo haces me liberas antes, así que no pienses en mi no pienses en matarme porque si tu lo haces me liberas antes.
Así que no pienses en mi no pienses en matarme porque si tu lo haces me liberas antes, así que no pienses en mi no pienses en matarme porque si tu lo haces me liberas antes.