Si Todo Arde

La Resiliencia en 'Si Todo Arde' de Manolo García

La canción 'Si Todo Arde' de Manolo García es una poderosa reflexión sobre la resiliencia y la capacidad de adaptarse a las adversidades. Desde el inicio, el artista nos invita a dejar de lado las construcciones efímeras y las preocupaciones mundanas, representadas por 'ciudades de relojes de arena' y 'paredes en la llanura yerma'. Estas imágenes evocan la fragilidad y la transitoriedad de las estructuras humanas, sugiriendo que aferrarse a ellas puede ser tanto atrapante como devastador. García nos insta a no encorvarnos ante los miedos y a enfrentar la vida con valentía y determinación.

El estribillo de la canción, 'Si todo arde, arderemos', es una declaración de intrepidez y aceptación del cambio. Manolo García se presenta como un 'jinete sin freno', una metáfora de alguien que no se detiene ante las dificultades y que está dispuesto a seguir adelante sin importar las circunstancias. La idea de que, si el mundo se detiene, ellos seguirán caminando, refuerza la noción de perseverancia y la capacidad de encontrar nuevos comienzos incluso en medio de la destrucción.

La repetición de la frase 'hacia la historia baldía' sugiere un viaje hacia lo desconocido, hacia un futuro incierto pero lleno de posibilidades. La canción también menciona 'cabalgar quimeras' y 'la voz ronca del tragafuegos', imágenes que evocan la lucha contra lo imposible y la valentía de enfrentar lo que otros temen. En conjunto, 'Si Todo Arde' es un himno a la resistencia, la adaptabilidad y la capacidad de reinventarse frente a las adversidades, recordándonos que siempre hay un camino a seguir, incluso cuando todo parece perdido.