Dos Extraños En La Ciudad

Dos Extraños en la Ciudad: Un Adiós Necesario

La canción 'Dos Extraños En La Ciudad' de Miriam Rodríguez aborda el doloroso proceso de una ruptura amorosa. Desde el inicio, la letra nos sitúa en un escenario donde dos personas que alguna vez fueron cercanas ahora se han convertido en extraños. La ciudad, un lugar vasto y lleno de vida, se convierte en el telón de fondo de su distanciamiento, simbolizando la soledad y la desconexión que sienten. La competencia y el orgullo han reemplazado al amor, y ambos se encuentran atrapados en una lucha por demostrar quién puede más, lo que solo agrava la situación.

La canción también explora la idea de que el amor no siempre es suficiente para mantener una relación. La frase 'Nadie de amor se muere' sugiere que, aunque el amor es importante, no es el único factor que determina la viabilidad de una relación. La protagonista reconoce los secretos y miedos de su pareja, pero también se da cuenta de que estos mismos miedos están impidiendo que ambos enfrenten la realidad de su situación. La necesidad de 'poner punto y aparte' es una metáfora para la necesidad de cerrar este capítulo y seguir adelante, a pesar del dolor que esto pueda causar.

Finalmente, la repetición de 'Déjame volar' es un grito de liberación. La protagonista siente que necesita espacio y tiempo para respirar, para evitar que la relación se convierta en un infierno. Este deseo de volar simboliza la búsqueda de libertad y paz interior, algo que solo puede lograrse al dejar atrás una relación que ya no funciona. La canción concluye con una reflexión sobre cómo han llegado a este punto, convirtiéndose en 'dos extraños más en la ciudad', una triste pero necesaria aceptación de la realidad.