Forsvarets Luftvernsrakett

Cohete antiaéreo de defensa

Era el verano en que cumplí doce,
y mi padre tenía todo bajo control.
El primer verano de vacaciones
en nuestra cabaña en el sur del país.

Habíamos estado nadando unas semanas en un muelle cercano,
cuando un día mi padre bajó
de repente gritó desgarradoramente:
¡salgan del agua!

Había visto un cohete antiaéreo de defensa
a un metro y medio de profundidad cerca de la orilla.
Había visto un peligroso cohete antiaéreo
pero afortunadamente logró sacarnos a todos a tierra,
mi padre era un hombre rápido y decidido.

Pronto todo el vecindario estaba allí para ver dónde estaba.
Uno que había trabajado en defensa estaba de acuerdo con mi padre,
seguramente había sido disparado desde un barco en el fiordo y había aterrizado detonado en el agua.
Tengo un amigo que conoce a alguien en el departamento de defensa.

Habían visto un cohete antiaéreo de defensa
a un metro y medio de profundidad cerca de la orilla.
y aún no había ocurrido ningún daño
mi padre dijo no te preocupes,
afortunadamente logró sacarnos a todos a tierra.
mi padre era un hombre rápido y decidido.

Entre las islas, una hora más tarde
una de las fragatas de defensa se acercó a la costa.
Veintiún militares evacuaron toda la zona
y cuatro buzos sacaron una botella del agua.

Porque lo que habían visto no era en absoluto un cohete antiaéreo,
a un metro y medio de profundidad cerca de la orilla.
Sino una vieja botella de cerveza que alguien había arrojado al mar,
mi padre no estaba cuando los buzos llegaron a tierra
mi padre era un hombre rápido y decidido
mi padre era un hombre rápido y decidido...