Gone Shootin'

La Tragedia de una Vida en Descontrol: 'Gone Shootin'' de AC/DC

La canción 'Gone Shootin'' de AC/DC, lanzada en 1978 como parte del álbum 'Powerage', aborda temas oscuros y trágicos a través de su letra. La narrativa se centra en una mujer que, atrapada en un ciclo de autodestrucción, se aleja de su vida cotidiana y de sus seres queridos. La frase 'gone shootin'' se puede interpretar como una metáfora de su adicción a las drogas, específicamente a la heroína, que se inyecta ('shooting up'). La letra describe cómo esta mujer, en un intento de escapar de su realidad, se sumerge cada vez más en su adicción, llevándola a un punto de no retorno.

El primer verso establece el tono de la canción, con la mujer comprando un boleto y empacando su corazón en una bolsa de viaje, simbolizando su decisión de dejar todo atrás sin despedirse. La mención de 'algo faltante en el vecindario de sus ojos llorosos' sugiere una profunda tristeza y vacío en su vida. La canción también menciona cómo el narrador, posiblemente un ser querido, observa impotente cómo ella se pierde en su adicción, incapaz de ayudarla.

En el segundo verso, la letra profundiza en la espiral descendente de la mujer. Se envuelve en su adicción como una 'segunda piel' y, a pesar de sus intentos de encontrar alivio ('respaldó su favorito nag'), nunca puede ganar. La referencia a 'otra pastilla' y 'sobrecarga' indica que su consumo de drogas ha alcanzado niveles peligrosos. La línea 'nunca pasó de la puerta del dormitorio' sugiere que su vida se ha reducido a un ciclo de consumo y aislamiento. La repetición de 'gone shootin'' enfatiza su estado de pérdida y la desesperación del narrador por no poder salvarla.

AC/DC, conocido por su estilo de rock duro y letras a menudo desenfrenadas, aborda en esta canción un tema más sombrío y serio. La banda utiliza su característico sonido energético para contar una historia de advertencia sobre los peligros de la adicción y la autodestrucción. La canción resuena con una mezcla de tristeza y frustración, reflejando la impotencia de ver a alguien amado caer en un abismo del que no puede escapar.