Cien Veces

La Resiliencia y la Determinación en 'Cien Veces' de Avalanch

La canción 'Cien Veces' de Avalanch es un himno a la resiliencia y la determinación personal. Desde el inicio, la letra nos presenta a un narrador que se enfrenta a la frialdad y la indiferencia de alguien cercano, posiblemente una figura de autoridad o una relación significativa. Esta persona no muestra empatía ni apoyo, lo que hace que el narrador se sienta engañado y lamenta haber confiado en ella. Sin embargo, a pesar de este desengaño, el narrador decide seguir adelante, enfrentando las adversidades con una actitud de lucha constante.

El estribillo de la canción es particularmente poderoso, repitiendo la idea de caer y levantarse cien veces. Esta repetición subraya la idea de que, sin importar cuántas veces uno pueda fracasar o ser maldecido por el camino que elige, siempre hay una oportunidad para levantarse y continuar. La frase 'sin mirar atrás' refuerza la importancia de no dejarse atrapar por el pasado y seguir avanzando hacia el futuro con determinación y coraje.

En la segunda estrofa, el narrador expresa un deseo de que la otra persona experimente lo que él ha vivido, forjando su destino con esfuerzo y sudor. Aquí, se presenta una metáfora de las heridas que, aunque dolorosas, eventualmente cicatrizan con el tiempo. Esta imagen sugiere que las dificultades y los desafíos son parte del proceso de crecimiento personal y que, a pesar de lo duro que puede ser luchar, es esencial continuar y seguir el propio camino, sin dejarse influenciar por los demás.