The Man From Harlem

El Hombre de Harlem

Fue en la noche en Mike's,
Hubo realmente todo un espectáculo,
Reúnanse, gente, mientras les doy todos los detalles.

Las mesas estaban llenas de chicas nerviosas,
Mordiéndose las uñas;
Estaban esperando al hombre de Harlem.

Las bebidas se servían a seis bits por lanzamiento,
Las cosas se movían un poco lento,
Los nervios de todos estaban a flor de piel.

De repente la habitación se quedó en silencio,
Los hombres olvidaron por completo su cuenta,
¿Quién debería entrar sino el hombre de Harlem?

Todos rodaron los ojos,
Las mujeres empezaron a suspirar,
Alguien gritó, música, luces y ginebra,

Todos despejaron un espacio,
Tenían sonrisas amplias en cada rostro,
Cómo les encantaba ver al hombre de Harlem.

Cuando empezó a bailar,
Llenó a todos con mucha energía,
Se retorcía y contoneaba; era una verdadera vergüenza.

Todos estaban atónitos,
Las mujeres lo miraban con asombro,
Cada una decía que quería al hombre de Harlem.

Miró hacia la esquina,
Y vio a un par de chicas
Y realmente parecían un poco deprimidas.
Otro tipo se acercó y le dijo al hombre de Harlem,
Ve allá y averigua qué les pasa a esas chicas.
Y ellas dijeron, Estamos un poco deprimidas.
Y él dijo, Tengo justo lo que necesitan:
Vamos, hermanas, fumen esto y relájense
Y olvídense de todo.