A Voz

La Voz Divina en la Música de Cassiane

La canción "A Voz" interpretada por Cassiane, una reconocida cantante brasileña de música gospel, es un himno que exalta la omnipotencia y la presencia constante de Dios a través de su voz. La letra hace múltiples referencias bíblicas, comenzando con la voz de trombeta que se escuchó desde la Sarça Ardente hasta el Monte Sinaí, simbolizando la comunicación directa de Dios con figuras como Moisés y Juan el Apóstol. La canción continúa describiendo esta voz como aquella que llamó a Samuel y la que convirtió al perseguidor, probablemente refiriéndose a la conversión de Saulo de Tarso en el camino a Damasco.

La repetición del estribillo que menciona a Dios como el Alfa y el Ômega, términos que significan el principio y el fin, resalta la idea de que Dios es eterno y gobierna el universo. La canción también habla de la voz de Dios como una fuerza poderosa que puede calmar el mar, expulsar demonios, curar y restaurar la vida, así como ofrecer perdón y resurrección. Estas metáforas refuerzan la creencia en un Dios que es protector, sanador y salvador. La mención de Lázaro, a quien Jesús resucitó de entre los muertos, subraya la creencia en el poder de la voz de Dios sobre la vida y la muerte.

Finalmente, la canción invita a los oyentes a escuchar y responder a la voz de Dios, simbolizada por el llamado a sentarse a la mesa, que representa la comunión y la aceptación. La petición de ser tocado con brasas del altar es una referencia a la purificación y al compromiso de seguir el mandato divino. En resumen, "A Voz" es una canción de adoración que celebra la relación personal y transformadora que los creyentes pueden tener con Dios a través de su voz poderosa y amorosa.