Chamamé Que Se Eleva

Chamamé Que Se Eleva: Un Canto a la Tierra y al Alma

La canción 'Chamamé Que Se Eleva' de Coqui Ortiz es una oda a la vida cotidiana y a las raíces culturales del noreste argentino, específicamente de la región del Litoral. A través de sus versos, Ortiz nos transporta a un mundo lleno de imágenes evocadoras y sentimientos profundos, donde el chamamé, un género musical tradicional, se convierte en el hilo conductor que une a las personas con su tierra y su historia.

Desde el inicio, la letra nos sumerge en un paisaje íntimo y familiar. Las referencias al río, los palmares y los caminos de tierra pintan un cuadro de la vida rural, mientras que las menciones a los viejos vecinos y la paz dominguera evocan una sensación de comunidad y tranquilidad. La figura del duende que hamaca su acordeón verdulera bajo la enredadera simboliza la presencia constante de la música y la tradición en la vida diaria.

La canción también explora temas de amor y amistad, como se refleja en los versos sobre la boca que besa un vaso de vino y florece en canciones abrazada al amigo. Esta imagen sugiere la importancia de los lazos humanos y la celebración de la vida a través de la música. Además, las referencias a los padres mateando con la radio en la oreja y las plazas gastadas por amores que esperan subrayan la conexión intergeneracional y la continuidad de las tradiciones.

Finalmente, el estribillo 'Chamamé que suspira, corazones que vuelan' encapsula la esencia de la canción: un homenaje al chamamé como una fuerza vital que eleva el espíritu y conecta a las personas con su identidad cultural. La mención del Viento Norte que trae fuego en la sangre y el manto que envuelve el aire refuerza la idea de que la música y la tierra están intrínsecamente ligadas, formando parte del alma sonora de la región.