The Blues Is My Business

El Blues es mi Negocio: Un Viaje por el Dolor y la Resiliencia

La canción 'The Blues Is My Business' de Etta James es una poderosa declaración de la relación íntima y casi profesional que la cantante tiene con el dolor y la adversidad. Desde el primer verso, Etta nos sumerge en un mundo lleno de problemas y pecados, donde las dificultades son tan abundantes que si se pudieran convertir en dinero, ella sería inmensamente rica. Esta metáfora no solo subraya la magnitud de sus problemas, sino que también resalta la ironía de encontrar valor en el sufrimiento.

Etta James, una de las voces más icónicas del blues y el soul, utiliza esta canción para expresar cómo el dolor y el desamor se han convertido en una parte integral de su vida. La repetición de la frase 'The blues is my business, and business is good' refuerza la idea de que el blues, un género musical nacido del sufrimiento y la lucha, es tanto su refugio como su medio de expresión. La letra sugiere que, aunque el mundo esté lleno de problemas y dolor, Etta ha aprendido a manejarlo y a convertirlo en algo productivo, casi como si fuera un negocio.

La canción también toca temas de responsabilidad y culpa. Etta menciona que está dispuesta a enfrentar los problemas del mundo, pero no a cargar con la culpa de ellos. Esto puede interpretarse como una declaración de resiliencia y autoafirmación, donde ella reconoce su capacidad para enfrentar la adversidad sin dejar que la culpa la consuma. En última instancia, 'The Blues Is My Business' es una celebración de la fuerza y la resistencia humana, encapsulada en la poderosa voz y el estilo inconfundible de Etta James.