Ese Muerto No Lo Cargo Yo

La Inocencia y la Culpa en 'Ese Muerto No Lo Cargo Yo' de Gustavo Quintero

La canción 'Ese Muerto No Lo Cargo Yo' de Gustavo Quintero narra una historia intrigante y oscura sobre la muerte de un personaje llamado don Goyo. La letra describe cómo encontraron a don Goyo muerto en un arroyo, amarrado con majagua y flotando en el agua. La causa de su muerte se atribuye a los celos, según lo que se menciona en la canción. Sin embargo, el narrador de la canción se desliga completamente de cualquier responsabilidad en el crimen, repitiendo insistentemente que él no estaba presente en el lugar y que no tiene nada que ver con el asesinato.

El estribillo de la canción, 'Ese muerto no lo cargo yo, que lo cargue aquel que lo mató', refuerza la idea de la inocencia del narrador y su rechazo a ser culpado por algo que no hizo. Esta frase se convierte en un mantra que refleja la desesperación y la necesidad de aclarar su inocencia. La repetición constante de esta línea también puede interpretarse como una crítica a la justicia y a la sociedad, que a menudo busca culpables sin pruebas suficientes, dejando a los inocentes en una posición vulnerable.

Gustavo Quintero, conocido por su estilo alegre y festivo en la música tropical colombiana, utiliza en esta canción un tono más serio y sombrío, aunque mantiene un ritmo pegajoso y bailable. La canción puede ser vista como una metáfora de situaciones en las que las personas son acusadas injustamente y deben luchar para demostrar su inocencia. Además, la referencia a los celos como motivo del crimen añade una capa de complejidad emocional, sugiriendo que las pasiones humanas pueden llevar a consecuencias trágicas.