Mandato

El Mandato Genético y la Sed de Tiempo en 'Mandato' de Jorge Drexler

La canción 'Mandato' de Jorge Drexler explora la idea de un impulso inherente y profundo que reside en nuestros genes, un mandato que se manifiesta en nuestras acciones y deseos. Desde el inicio, Drexler nos lleva a lo más profundo de los cromosomas, sugiriendo que este mandato es algo innato, presente en cada célula de nuestro ser. La metáfora del mandato como un agua que brota de una fuente clara y poderosa, aunque silenciosa, refuerza la idea de que estos impulsos son naturales y omnipresentes, aunque no siempre conscientes.

La repetición de la frase 'todo poderosa sed de tiempo' sugiere una urgencia inherente en la naturaleza humana, una necesidad de aprovechar el tiempo y vivir intensamente. Esta sed de tiempo está viva en cada célula, comparada con el polen, que es esencial para la reproducción y la continuidad de la vida. Drexler también hace referencia a la herencia genética con la repetición de 'tátara-tátara-tátara-abuela' y 'tátara-tátara-tátara-abuelo', subrayando cómo estos impulsos y deseos han sido transmitidos a través de generaciones, influyendo en nuestro comportamiento actual.

La canción también toca el tema de la vida nocturna y las promesas vagas que se hacen en ese contexto. Las copas llenas de promesas y los gestos frente al espejo del baño reflejan momentos de introspección y autoevaluación, donde el mandato genético sigue gobernando nuestras acciones. Drexler sugiere que, aunque estos impulsos son poderosos, también son sutiles y a menudo pasan desapercibidos, pero siempre están presentes, encajando las piezas de nuestras vidas en la noche.

' Mandato' es una reflexión poética sobre la naturaleza humana, la herencia genética y la urgencia de vivir. Drexler utiliza metáforas y referencias biológicas para profundizar en estos temas, creando una canción rica en significado y resonancia emocional.