Floricanto

La Travesía del Alma en 'Floricanto' de Lhasa de Sela

La canción 'Floricanto' de Lhasa de Sela es una profunda meditación sobre la vida, el amor y la inevitable transitoriedad de la existencia. Desde el inicio, la letra expresa un dolor profundo y una resignación ante el destino. La frase 'Mi corazón sufre y se llena de enojo' refleja una lucha interna, una mezcla de tristeza y rabia ante la fugacidad de la vida y el amor. La idea de que 'solo una vez se nace, una vez se es un hombre, una vez se ama' subraya la unicidad y la irrepetibilidad de nuestras experiencias vitales, sugiriendo que cada momento es precioso y efímero.

El estribillo 'Del todos nos vamos y desaparecemos en su casa' evoca la inevitabilidad de la muerte, un destino común para todos los seres humanos. La repetición de esta línea refuerza la idea de que la muerte es una parte integral de la vida, un recordatorio constante de nuestra mortalidad. La imagen de 'desaparecer en su casa' puede interpretarse como una metáfora de regresar al origen, a un lugar de descanso final, lo que añade una capa de serenidad y aceptación a la canción.

Lhasa de Sela utiliza metáforas y simbolismos para explorar la relación entre la vida y la muerte. La línea 'Alla se hacen las cosas ondulando dondevida no hay' sugiere un lugar más allá de la vida, un espacio donde las reglas de la existencia terrenal no aplican. Este verso puede interpretarse como una referencia a un plano espiritual o a la eternidad, donde las almas continúan su viaje. La canción, con su tono melancólico y reflexivo, invita al oyente a contemplar la naturaleza transitoria de la vida y a encontrar belleza y significado en cada momento, a pesar de su inevitable fin.