Royals

Desafiando la Realeza: La Crítica Social en 'Royals' de Lorde

La canción 'Royals' de la artista neozelandesa Lorde es una crítica a la cultura del materialismo y el lujo excesivo promovido por gran parte de la industria musical y la sociedad en general. A través de su letra, Lorde expresa su desinterés por los símbolos de riqueza y estatus que a menudo se glorifican en la música pop y el hip-hop. La canción comienza con una confesión de que, a pesar de no haber experimentado la riqueza de primera mano ('I’ve never seen a diamond in the flesh'), la cantante y sus amigos se sienten satisfechos con lo que tienen y no envidian el código postal de las zonas más acomodadas ('no post code envy').

El estribillo de 'Royals' es un rechazo directo a la aspiración de una vida de opulencia ('And we’ll never be royals'), afirmando que ese tipo de lujo no está en su sangre y que, en cambio, anhelan una forma de felicidad diferente ('We crave a different kind of buzz'). Lorde utiliza la metáfora de ser una 'ruler' o 'Queen Bee' para ilustrar la idea de que uno puede crear su propio reino y definir el éxito en sus propios términos, en lugar de seguir los dictados de la sociedad. La canción también destaca la realidad de muchas personas que, aunque no nacieron en la riqueza ('We didn’t come from money'), encuentran la felicidad y la satisfacción en las cosas simples de la vida.

Musicalmente, 'Royals' se caracteriza por su minimalismo y su ritmo pegajoso, lo que ayudó a que la canción se convirtiera en un éxito mundial. Lorde, con su estilo único y su voz distintiva, logró capturar la atención de una audiencia joven que se identifica con el mensaje de autenticidad y rechazo a los valores materialistas. La canción se convirtió en un himno para aquellos que buscan un significado más allá de lo material y que valoran la individualidad por encima de la conformidad.