Acácia Amarela

La armonía de 'Acácia Amarela': Un análisis lírico

La canción 'Acácia Amarela' interpretada por Luiz Gonzaga, uno de los grandes exponentes de la música popular brasileña, especialmente del género Forró, es una obra que destila serenidad y contentamiento. La letra describe la belleza de una acacia amarilla situada cerca de la casa del narrador, la cual simboliza un lugar de paz y equilibrio. La casa es descrita como 'justa y perfecta', lo que sugiere que el narrador encuentra en ella un refugio ideal y un espacio de vida equilibrado.

El narrador se identifica como un 'feliz operario', lo que podría interpretarse como una metáfora de alguien que trabaja en la construcción de su propia felicidad y bienestar. La mención del aumento de salario sin lucha ni discordia puede ser una alusión a las recompensas emocionales y espirituales que se obtienen sin conflictos ni tensiones. La canción evoca un sentido de gratitud y satisfacción con la vida sencilla y armoniosa que lleva el narrador.

La referencia al 'Gran Arquitecto del Universo' es una expresión comúnmente asociada con la masonería, que simboliza a la entidad suprema o a Dios. En este contexto, la frase sugiere que la armonía y la concordia son parte del diseño universal, y que el narrador se siente alineado con estos principios. La repetición de 'Es harmonia, es concórdia' refuerza la idea de que la paz y la armonía son valores centrales en la vida del narrador y en su percepción del mundo.