Oh, Oh, Oh, Chá, Lá, Lá

La Contemplación Divina en 'Oh, Oh, Oh, Chá, Lá, Lá' de Mara Lima

La canción 'Oh, Oh, Oh, Chá, Lá, Lá' de Mara Lima es una expresión de alabanza y contemplación de la grandeza divina. La repetición de 'chá, lá, lá' y 'aleluia' crea un ambiente de adoración y celebración, invitando al oyente a unirse en un coro de gratitud y reverencia. Esta estructura repetitiva no solo refuerza el mensaje de la canción, sino que también facilita la participación comunitaria, un aspecto central en muchas canciones de alabanza y adoración cristiana.

En los versos, Mara Lima reflexiona sobre la creación divina, específicamente al observar el cielo, la luna y las estrellas. Esta contemplación lleva a una pregunta existencial: '¿qué es el hombre?' Este cuestionamiento resuena con el Salmo 8 de la Biblia, donde el salmista se maravilla de la creación de Dios y se pregunta por el lugar del ser humano en el vasto universo. La letra sugiere una humildad profunda y un reconocimiento de la pequeñez humana frente a la inmensidad de la creación divina.

Otro aspecto significativo de la canción es la referencia a la fortaleza fundada 'pela boca dos meninos e dos que mamam'. Esta línea también tiene raíces bíblicas, evocando la idea de que Dios revela su fuerza y sabiduría a través de los más inocentes y vulnerables. Es una afirmación de que la verdadera fortaleza y sabiduría no se encuentran en el poder terrenal, sino en la pureza y la fe de los niños. Este mensaje es un recordatorio de la importancia de la humildad y la simplicidad en la vida espiritual.

En conjunto, 'Oh, Oh, Oh, Chá, Lá, Lá' es una canción que invita a la reflexión sobre la grandeza de Dios y la humildad del ser humano. A través de su letra y su estructura musical, Mara Lima logra transmitir un mensaje de alabanza y adoración que resuena profundamente con los oyentes, recordándoles la belleza y el misterio de la creación divina.