Nunca Ire

La Dualidad del Brillo: Un Análisis de 'Nunca Iré' de No Lo Soporto

La canción 'Nunca Iré' de No Lo Soporto explora la complejidad de la identidad y la percepción personal. Desde el inicio, la letra nos introduce a un sentimiento de agotamiento y sinceridad: 'No tengo más tiempo, más tiempo de disimular'. Aquí, la vocalista expresa la necesidad de dejar de fingir y de ser auténtica, aunque eso signifique aceptar que no puede estar en ciertos lugares o situaciones que no le corresponden. Esta honestidad brutal se convierte en un tema recurrente a lo largo de la canción.

El estribillo 'Que todo lo que brilla en mí, no es más que lo que me empaña' es una metáfora poderosa que sugiere una dualidad interna. Lo que parece ser una cualidad positiva o atractiva ('lo que brilla') es, en realidad, una fuente de conflicto o dolor ('lo que me empaña'). Esta dicotomía refleja la lucha interna de la artista entre la apariencia y la realidad, entre lo que se muestra al mundo y lo que realmente se siente por dentro. La repetición de esta línea refuerza la idea de que esta dualidad es una parte integral de su identidad.

La canción también aborda la idea de pérdida y aceptación. 'Si alguna vez pierdo algo que tuve que cuidar, si prefiero imaginar lo que nunca seré' sugiere una resignación ante las expectativas no cumplidas y los sueños no realizados. Sin embargo, esta aceptación no es necesariamente negativa; es una forma de reconciliarse con uno mismo y con las limitaciones personales. La frase final 'Todo lo que brilla en mí, está donde nunca iré' encapsula esta resignación, indicando que hay aspectos de su ser que nunca podrán ser plenamente realizados o comprendidos, y que eso está bien.