Spreading The Disease

La Cruda Realidad de 'Spreading The Disease' de Queensrÿche

La canción 'Spreading The Disease' de Queensrÿche es una crítica mordaz a la hipocresía y corrupción en la sociedad moderna. La letra narra la historia de una joven que, huyendo de su hogar a los dieciséis años, se ve obligada a trabajar en espectáculos de sadomasoquismo en Times Square. La crudeza de su situación se refleja en la línea 'Twenty-five bucks a fuck, and John's a happy man', mostrando la explotación y deshumanización que sufre. Esta joven, que luego se convierte en 'Sister Mary', es rescatada por 'Father William', pero solo para ser utilizada de otra manera, esta vez bajo el manto de la religión. La letra sugiere que la religión, al igual que el sexo, puede ser una herramienta de manipulación y control, con 'Father William' tomando a Mary 'on the altar like a sacrifice'.

La canción también aborda temas más amplios de corrupción y desigualdad social. La línea 'Religion and sex are power plays, manipulate the people for the money they pay' critica cómo tanto la religión como la industria del sexo pueden ser explotadas para obtener ganancias financieras. La letra también menciona la hipocresía de los políticos que 'say no to drugs while we pay for wars in South America', subrayando la doble moral y las prioridades distorsionadas de aquellos en el poder. La canción denuncia cómo los bancos y los ricos se benefician mientras los pobres siguen siendo oprimidos, y cómo la policía es cómplice al 'look away as the one percent rules America'.

'Queensrÿche' utiliza esta canción para exponer las injusticias y la corrupción que permean la sociedad. La repetición del estribillo 'Spreading the disease, everybody needs but no one wants to see' enfatiza cómo estas problemáticas son omnipresentes y, sin embargo, a menudo ignoradas o aceptadas pasivamente. La banda, conocida por su estilo progresivo y letras profundas, utiliza 'Spreading The Disease' para invitar a la reflexión y cuestionar las estructuras de poder y control que afectan nuestras vidas diarias.