Ronda Del Ausente

La Nostalgia y la Esperanza en 'Ronda Del Ausente' de Quilapayún

La canción 'Ronda Del Ausente' de Quilapayún es una obra cargada de simbolismo y emociones profundas. La letra narra la historia de un niño que anhela la presencia de su padre, representada por una estrella dentro de un cascabel. Este deseo infantil encapsula la esperanza y la inocencia, mientras que el cascabel, un objeto pequeño y sonoro, simboliza la alegría y la conexión que el niño busca recuperar con su padre. La estrella, por su parte, representa un ideal inalcanzable, algo que brilla en la distancia y que el niño desea traer a su realidad cotidiana.

El padre, al mirar el cielo y ver a su hijo florecer, sugiere una conexión espiritual y emocional que trasciende la distancia física. La noche se convierte en un jardín y el viento en un carrusel, imágenes que evocan un mundo de sueños y fantasía donde la separación no existe. Esta metáfora del jardín nocturno y el carrusel de viento sugiere un espacio donde el tiempo y la distancia se disuelven, permitiendo la unión de padre e hijo en un plano más allá de lo tangible.

La canción también aborda la inevitabilidad del cambio y el flujo constante de la vida, como se refleja en las imágenes del humo que sube por los muros y el agua del río que galopa sin detenerse. Estas metáforas subrayan la idea de que, a pesar de las dificultades y las separaciones, la vida sigue su curso y siempre hay esperanza de un nuevo amanecer. La casa que alumbra el camino y la puerta que se abre despacio simbolizan la posibilidad de un reencuentro, un regreso a la calidez del hogar y la familia. En última instancia, 'Ronda Del Ausente' es una canción que habla de la esperanza, la nostalgia y la eterna búsqueda de conexión y amor familiar.