Frida

Frida: Un Brindis por el Desamor y la Autoaceptación

La canción 'Frida' de Salma es una poderosa balada que explora el dolor del desamor y la lucha por la autoaceptación. Desde el inicio, la protagonista se enfrenta a las críticas y juicios de los demás, quienes la tildan de villana y de no sentir nada en el amor. Sin embargo, ella sabe que estas percepciones no son ciertas y que, en realidad, sufre profundamente por dentro. La letra refleja una lucha interna y una resistencia a ser encasillada por las opiniones ajenas.

El estribillo de la canción, con su repetitivo 'Ay, ay, ay no estoy llorando', es una metáfora del intento de la protagonista de ocultar su dolor. La referencia a 'una basura en el corazón' simboliza las heridas emocionales que no puede evitar. La combinación de tequila y mariachi, elementos profundamente arraigados en la cultura mexicana, subraya la intensidad de su sufrimiento y la búsqueda de consuelo en la bebida y la música tradicional. La mención de Frida, probablemente en alusión a la famosa artista Frida Kahlo, añade una capa de complejidad, sugiriendo una lucha similar por el amor propio y la aceptación.

A lo largo de la canción, la protagonista se debate entre el dolor y el deseo de olvidar. La repetición de 'una botella entera no bastó, me faltan 100 para olvidarte' enfatiza la magnitud de su desconsuelo. Sin embargo, también hay un reconocimiento de que el dolor, cuando es por amor, puede tener un matiz de gozo. Esta dualidad refleja una comprensión profunda de las emociones humanas y la aceptación de que el sufrimiento es parte del proceso de amar y ser amado. La canción concluye con un brindis por el dolor y el despecho, una aceptación de su realidad y una celebración de su resistencia y fortaleza.