A Rolinha

La libertad de 'A Rolinha': Un canto a la naturaleza y la sencillez

La canción 'A Rolinha' interpretada por Selma do Côco, es una pieza que se sumerge en la simplicidad de la vida rural y la conexión con la naturaleza. La letra describe una escena donde un sapo corre, una niña llora y una rola (un tipo de ave) escapa de su jaula. La repetición de 'pega, pega a minha rola' (atrapa, atrapa mi rola) puede interpretarse como un llamado a recuperar algo que se ha perdido, en este caso, la rola que ha volado lejos.

El estribillo 'Oi pega, pega, pega!' y las variaciones de 'corre, corre, corre!' y 'avôa, avôa, avôa' refuerzan la urgencia y el movimiento, evocando la imagen de una persecución frenética. Sin embargo, hay un tono juguetón en la canción que sugiere que esta 'persecución' podría ser más una metáfora de la vida cotidiana y sus pequeñas aventuras. Además, la mención de no querer visitar la casa de otro por temor a que 'coman su gallina' debido a su 'boca grande' añade un toque de humor y puede interpretarse como una expresión de desconfianza o de proteger lo que uno valora.

Selma do Côco, conocida por su contribución al género del côco, un estilo musical y de danza del noreste de Brasil, infunde en 'A Rolinha' el ritmo y la alegría característicos de su música. La canción, con su ritmo contagioso y letras pintorescas, celebra la vida rural, la libertad y la simplicidad, al tiempo que toca temas de confianza y la importancia de cuidar lo que es querido para uno.