Eternidad

Eternidad: Un Viaje de Autodescubrimiento y Resiliencia

La canción 'Eternidad' de Sôber es una profunda reflexión sobre el dolor, la autocomprensión y la resiliencia. La letra nos presenta a un narrador que observa a alguien cercano, posiblemente un amigo o un ser querido, que ha crecido de manera solitaria y descuidada. Este individuo ha logrado prevalecer, pero aún busca en otros lo que le falta en sí mismo. La canción aborda temas de sinceridad y autenticidad, sugiriendo que no se debe buscar en los demás lo que uno mismo debe encontrar dentro de sí.

El estribillo de la canción, 'Rompe el muro que impide que pase la Luz y absorbe su Calor', es una metáfora poderosa que invita a derribar las barreras internas que impiden el crecimiento personal y la aceptación de la luz y el calor, símbolos de la verdad y el amor. El narrador se niega a ser culpado por el dolor del otro, indicando que cada individuo es responsable de su propio sufrimiento y sanación. Esta idea se refuerza con la línea 'No me culpes a mí de tu dolor'.

La canción también explora la envidia y la hipocresía, sugiriendo que estos sentimientos pueden llevar a la desesperación y al deseo de encontrar una salida. Sin embargo, el narrador parece resignado a soportar el rechazo y el dolor, quizás por una eternidad, lo que refleja una aceptación estoica de la realidad. La última estrofa, 'Camina, sin rumbo donde ir / Viaja, hacia un mundo sin razón / No encuentra, a su paso nada / Nada', pinta un cuadro de desorientación y vacío, subrayando la lucha interna del individuo. En conjunto, 'Eternidad' es una canción que nos invita a la introspección y a la búsqueda de la verdad y la autenticidad en nosotros mismos.