Tan alta que está la luna

La Tristeza del Engaño y la Libertad del Alma en 'Tan alta que está la luna'

La canción 'Tan alta que está la luna' de Tarancón es una profunda reflexión sobre el dolor del engaño amoroso y la búsqueda de la libertad personal. La letra comienza con una imagen poética de la luna y el lucero, símbolos de la soledad y la tristeza que siente el protagonista tras ser engañado por su amada. La luna, alta en el cielo, representa la distancia y la inalcanzabilidad de la felicidad perdida, mientras que el lucero, que la acompaña, simboliza la esperanza tenue que aún persiste en medio de la desolación.

El estribillo 'Serás libre, palomita, como soy yo' sugiere un anhelo de libertad y de dejar atrás el dolor. La palomita, un símbolo de paz y libertad, contrasta con el estado emocional del protagonista, quien se siente atrapado en su sufrimiento. La repetición de 'como soy yo' enfatiza la necesidad de liberarse de las ataduras emocionales y encontrar una nueva forma de vivir sin el peso del engaño.

La metáfora del 'cuervo negro' que 'no pierde su volido' refuerza la idea de la resiliencia y la capacidad de seguir adelante a pesar de las adversidades. El cuervo, a menudo asociado con la muerte y la mala suerte, aquí se convierte en un símbolo de fortaleza y perseverancia. La canción concluye con una imagen de soledad en el rancho, donde el protagonista se enfrenta a su dolor tanto de noche como de día, bajo la mirada constante de la luna y el sol. Esta dualidad de la luz y la oscuridad refleja la lucha interna entre el dolor y la esperanza, y la búsqueda de una nueva libertad emocional.