Ele É Um Velho, É Muito Velho

La Reverencia a la Sabiduría Ancestral en 'Ele É Um Velho, É Muito Velho'

La canción 'Ele É Um Velho, É Muito Velho' es un punto de encuentro entre la música y la espiritualidad dentro de la tradición de la Umbanda, una religión afrobrasileña que combina elementos del catolicismo, el espiritismo y las creencias africanas. La letra de la canción hace referencia a una figura venerada dentro de esta fe, que se presenta como un anciano sabio y portador de una fuerza sagrada. La repetición de la frase 'Ele é um velho, é muito velho' enfatiza la antigüedad y la sabiduría que se asocian con la edad y la experiencia.

El 'Orixá das palhas' mencionado en la canción se refiere a Omulú, una deidad de la religión Yoruba, que es sincretizada en la Umbanda y el Candomblé. Omulú es conocido como el orixá de la salud y la enfermedad, y se le asocia con la curación y la transformación. Las 'palhas' o pajas en la mano simbolizan su conexión con la tierra y la naturaleza, elementos esenciales en la práctica de estas religiones. La canción habla de la preparación de un 'tapete de doborô', que es una ofrenda ritual para honrar a este orixá y pedir su protección y bendiciones.

La canción no solo es un acto de devoción, sino que también refleja la cosmovisión de la Umbanda, donde el respeto por los mayores y las fuerzas de la naturaleza son fundamentales. A través de su melodía y palabras, 'Ele É Um Velho, É Muito Velho' transmite un mensaje de respeto, curación y amor, valores centrales en la práctica religiosa y en la vida comunitaria de sus practicantes.