Freestyle Session #1

La Cruda Realidad del Barrio en 'Freestyle Session #1' de Zaramay

En 'Freestyle Session #1', Zaramay nos ofrece una ventana a la vida en los barrios más duros, donde la supervivencia y la lucha diaria son la norma. La canción está impregnada de referencias a la cultura callejera, desde la vestimenta hasta las actividades ilícitas. Zaramay menciona su evolución personal, pasando de ser alguien que era objeto de burla por su forma de vestir, a convertirse en una figura respetada que usa marcas de lujo. Esta transformación simboliza no solo un cambio de estatus económico, sino también una reivindicación personal y social.

La letra también aborda la injusticia y la dureza de la vida en el barrio. Zaramay habla de amigos que han pasado de ver dibujos animados a delinquir, y de cómo la vida puede ser cruelmente irónica, con personas que se cuidan toda su vida solo para ser sorprendidas por enfermedades terminales. La mención de la 'yerba mala' que nunca muere y las 'perras malas' que buscan drogas subraya la persistencia de los vicios y las malas influencias en estos entornos. La canción también toca el dolor de perder a seres queridos, pero con un matiz de resignación y aceptación de que ahora están en paz.

Zaramay no se detiene en la crítica social, sino que también reflexiona sobre la hipocresía y la superficialidad de la sociedad. Habla de cómo la gente juzga sin conocer, y de la inutilidad de temer a la muerte, ya que no nos hace más fuertes. La mención de figuras y elementos culturales como 'Mike Jager en satisfaction' y 'family sega y playstation' añade una capa de nostalgia y contraste entre el pasado y el presente. En última instancia, 'Freestyle Session #1' es un retrato sincero y sin adornos de la vida en el barrio, con todas sus complejidades y contradicciones.