Silêncio

El dolor y la redención en 'Silêncio' de Leni Silva

La canción 'Silêncio' de Leni Silva es una emotiva representación de los momentos finales de Jesucristo antes de su crucifixión, según la narrativa cristiana. La letra comienza con la descripción del silencio en el jardín de Getsemaní, donde Jesús ora intensamente, pidiendo que, si es posible, se le ahorre el sufrimiento que está por venir, pero al mismo tiempo, se somete a la voluntad de su Padre. Este pasaje es una referencia directa a los Evangelios del Nuevo Testamento y destaca la humanidad de Jesús en su momento de angustia.

La canción continúa con la descripción de los eventos que siguieron: Jesús es llevado ante Pilatos, y la multitud pide su crucifixión. La narrativa enfatiza la pasividad de Jesús, comparándolo con un cordeiro, o cordero, que no se queja, simbolizando su inocencia y la aceptación de su destino. La crucifixión es descrita con imágenes poderosas: la tierra tiembla, el sol se oscurece, incapaz de mirar la escena, y el velo del templo se rasga, lo que en la tradición cristiana simboliza el fin de la separación entre Dios y la humanidad.

El clímax emocional de la canción llega con las palabras de Jesús en la cruz, 'Elohim, Elohim, Lamá sabactâni', que se traduce como 'Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?'. Estas palabras expresan un profundo sentimiento de abandono y sufrimiento, pero también son interpretadas por los cristianos como el cumplimiento de las profecías mesiánicas y el inicio de la redención de la humanidad. Leni Silva, conocido por su música religiosa, utiliza esta canción para transmitir un mensaje de fe, sacrificio y esperanza en la promesa de salvación.