El Día En Que Murió El Arte

La Muerte del Arte: Una Crítica a la Industria Musical

En 'El Día En Que Murió El Arte', Nach ofrece una crítica mordaz y sin concesiones a la industria musical contemporánea. La canción se abre con una reflexión sobre la pérdida de fe en una industria que él describe como falsa e hipócrita. Nach denuncia cómo muchos artistas son fabricados y manipulados por empresarios que buscan únicamente el beneficio económico, sin importarles la autenticidad o la calidad artística. Esta crítica se extiende a la superficialidad de la música comercial, que se caracteriza por ser vacía, banal y pegadiza, diseñada exclusivamente para vender.

Nach también aborda la falta de autenticidad en los artistas que se prestan a este juego, describiéndolos como 'muñecos' en manos de empresarios. La canción critica cómo estos artistas son moldeados y controlados, desde su apariencia hasta las canciones que interpretan, todo con el objetivo de maximizar las ventas. Nach lamenta que estos artistas sean utilizados y desechados una vez que ya no son rentables, convirtiéndose en 'famosos arrepentidos' que terminan en el olvido. Esta visión pesimista de la industria musical refleja una profunda desilusión con el estado actual del arte y la cultura popular.

Finalmente, Nach contrasta esta realidad con su visión del hip hop como un género profundo y real, que no puede ser tocado ni retocado. Para él, el hip hop es una forma de arte auténtica que refleja la verdad de quienes lo viven. En este sentido, Nach se posiciona como un 'artesano de la verdad', en oposición a los 'sombras de las sombras de un triste timo' que representan los artistas comerciales. La canción es, en última instancia, un llamado a la autenticidad y a la preservación del arte verdadero en un mundo cada vez más dominado por la superficialidad y el consumismo.