La Quiero Asi

La Complejidad del Amor en 'La Quiero Así' de Alberto Plaza

La canción 'La Quiero Así' de Alberto Plaza es una oda al amor en su forma más pura y compleja. A través de una lírica delicada y emotiva, Plaza describe a una mujer que encarna la serenidad y la paz, con una 'mágica sonrisa' y un cabello que evoca el trigo. Esta descripción inicial sugiere una idealización de la figura femenina, presentándola como un ser casi etéreo y perfecto. La comparación con elementos naturales como el amanecer y el tiempo resalta su fragilidad y belleza, mientras que la frase 'ella es el amor que se ha vestido de mujer' encapsula la idea de que esta persona es la personificación del amor mismo.

Sin embargo, la canción no se queda en la idealización. Plaza también reconoce la dualidad de esta mujer, quien puede transformarse en un 'aguacero' o un 'relámpago que asusta'. Esta dualidad refleja la complejidad del amor y las relaciones humanas, donde la misma persona puede ser fuente de paz y tormenta. A pesar de estos cambios, el cantante afirma que es precisamente esta complejidad lo que le atrae y le gusta. Esta aceptación de la imperfección y la volatilidad en la persona amada añade una capa de realismo y profundidad a la canción.

El estribillo 'la quiero así, sencillamente así, perfectamente así' refuerza la idea de aceptación total y amor incondicional. Plaza no busca cambiar a la persona amada; la quiere tal como es, con todas sus virtudes y defectos. La repetición de adjetivos como 'apasionadamente' y 'enamoradamente' subraya la intensidad de sus sentimientos, mientras que la frase 'no tengo medida' sugiere que su amor es ilimitado y sin restricciones. En conjunto, 'La Quiero Así' es una celebración del amor en todas sus facetas, desde la serenidad hasta la tormenta, y una afirmación de que el verdadero amor implica aceptar y amar a la otra persona en su totalidad.